En Chile los incendios forestales son una amenaza recurrente durante la época seca (primavera-verano). Ante la ocurrencia de un siniestro, conocer los fonos de emergencia adecuados es vital. Por ejemplo, la Cruz Roja Chilena destaca que al detectar humo o llamas se debe llamar de inmediato al 130 (CONAF). Esta guía detallada explica qué es un incendio forestal, sus causas, cómo actuar paso a paso, medidas de prevención, las instituciones clave (CONAF, Bomberos, SENAPRED, Carabineros y PDI) y los teléfonos de emergencia (130, 132, 133, 134, etc.) en Chile. También se incluyen recursos oficiales, ejemplos prácticos y consejos diferenciados para zonas urbanas y rurales. El objetivo es servir como referencia clara y completa para que la ciudadanía se prepare ante un incendio forestal.

• Cómo contactar a Carabineros de Chile en caso de emergencia

¿Qué es un incendio forestal?

Un incendio forestal es un fuego que, sea cual sea su origen, se propaga de forma incontrolada a través de vegetación en zonas rurales o cercanas a viviendas. Según la SENAPRED, “un incendio forestal es un fuego que, cualquiera sea su origen, se propaga sin control en terrenos rurales o cerca de viviendas, a través de árboles, matorrales y pastizales, verdes y/o secos”​. En otras palabras, cualquier llama que salga de control en áreas boscosas o de matorrales constituye un incendio forestal. A nivel mundial, estos incendios son la principal causa de destrucción de vegetación, pues se avivan con altas temperaturas, vientos fuertes y vegetación seca​. En Chile, con su clima mediterráneo, esta situación se hace más crítica cada verano.

Características de los incendios forestales en Chile

La geografía y el clima de Chile favorecen la ocurrencia de incendios forestales. En la zona centro-sur del país los veranos son muy secos, con olas de calor y vientos constantes, condiciones denominadas “30-30-30” (temperaturas de ≥30 °C, humedad relativa <30% y vientos de >30 km/h) que facilitan la rápida propagación del fuego​. De hecho, estudios recientes muestran que la superficie quemada por temporada ha aumentado sustancialmente, incluso cuando la cantidad de incendios se mantiene más o menos estable; esto se atribuye principalmente a un factor climático más extremo​. Además, existen grandes extensiones de vegetación altamente inflamable en Chile, como plantaciones de pino y eucalipto, que funcionan como combustible. La combinación de un clima seco y caliente con masas extensas de bosque ha sido llamada “peligrosa” por los expertos​. A ello se suma la expansión urbana en la interfase bosque-ciudad, lo que hace que muchos incendios comiencen en zonas de interfaz o afecten viviendas en los bordes de áreas forestales​.

Principales causas de incendios forestales en Chile

La inmensa mayoría de los incendios forestales en Chile son provocados por la acción humana, ya sea por descuido o intencionalmente. CONAF estima que alrededor del 99.7% de los incendios tienen origen antrópico​. Los datos nacionales más recientes indican que aproximadamente un 58,2% de los incendios son producto de negligencias o accidentes (quemas mal controladas, fogatas, colillas encendidas, maquinaria agrícola, entre otros) y un 24% tienen causa intencional (quemas provocadas)​. Solo un reducido 0.2% se atribuye a causas naturales (como rayos o erupciones volcánicas)​. Las causas generales más frecuentes incluyen:

• Incidentes humanos: Descuidos al hacer fogatas, quemas agrícolas sin permiso o mal ejecutadas, colillas de cigarrillos arrojadas a la vegetación seca, uso de maquinaria que genera chispas. Estas negligencias representan la mayoría de los siniestros.
• Intencionales: Quemas deliberadas, ya sea para preparar suelos agrícolas, controlar malezas o por vandalismo. Estas intencionalidades son responsables de cerca del 24% de los incendios en Chile​.
• Desconocidas: En algunos casos la causa no puede determinarse con certeza (alrededor del 17,6% según datos de CONAF).
• Naturales: Tormentas eléctricas o eventos volcánicos, que son muy poco comunes en nuestro país. En Chile representan solo un 0,2% de los incendios forestales​.

Es decir, prácticamente todas las conflagraciones forestales pueden evitarse con precaución humana. La expansión de zonas habitadas hacia áreas boscosas también incrementa los puntos de ignición potencial (por ejemplo cortafuegos mal implementados o cables eléctricos en mal estado), exacerbando este riesgo. Por ello la prevención recae en gran medida en la responsabilidad ciudadana.

¿Qué hacer en caso de enfrentar un incendio forestal?

Mantener la calma y alertar a emergencias

Lo primero es informar de inmediato a los servicios de emergencia. Si observa humo o fuego, contacte de inmediato a las autoridades competentes. En Chile es fundamental llamar a los organismos especializados: por ejemplo, los expertos señalan que ante la detección de fuego forestal debe comunicarse enseguida con CONAF o Bomberos para activar la respuesta adecuada​. Asegúrese de dar la ubicación exacta del incendio y cualquier detalle relevante (color de humo, dirección del viento, riesgo de viviendas). Según el Ministerio de Salud, “cuando una persona detecta humo o llamas se debe comunicar con los bomberos o las autoridades locales para que procedan de la manera adecuada”. Los números telefónicos clave son los siguientes: CONAF (130), Bomberos (132), Carabineros (133) y PDI (134)​.

Preparar la evacuación

Tras alertar a los equipos de emergencia, prepare la posible evacuación. Reúna a su familia o compañeros y elabore un plan simple: identifique rutas de escape (caminos o vías de evacuación), un punto de encuentro seguro y un kit de emergencia con agua, linterna, radio a pilas, documentos personales, medicamentos y otros objetos esenciales. Escuche en todo momento las alertas oficiales (radio, televisión, redes sociales de organismos de emergencia) y acate las indicaciones de las autoridades: en caso de declarar alertas rojas o violetas, evite perder tiempo. Los especialistas recuerdan que evacuar con anticipación es crucial: no espere a que el fuego esté a las puertas. Un estudio de la CNCR destaca que “marcharse con antelación permite ponerse a salvo a tiempo además de facilitar la labor de los servicios de emergencias”​. Antes de salir, desconecte el suministro de gas y electricidad de la vivienda​ y cierre puertas y ventanas (para minimizar el ingreso de humo y brasas)​. Prepare también un vehículo con el tanque lleno (por si debe evacuar en auto) y lleve consigo linternas y cargadores portátiles. Utilice el teléfono sólo para llamadas urgentes o coordinaciones esenciales, ya que las líneas pueden saturarse.

Protegerse durante la evacuación o refugio

Si evacúa, muévase con orden: transporte a las personas con más dificultades (niños, adultos mayores) y saque a los animales domésticos (manteniendo a las mascotas bajo control) tal como aconseja la SAG​. Si es posible, camine o conduzca por áreas despejadas alejándose de la dirección del fuego. Según expertos extranjeros, durante la evacuación es útil observar el comportamiento del fuego en todo momento; los incendios pueden cambiar de dirección e intensidad abruptamente​. Procure mantenerse alejado de vegetación densa y refugiarse cerca de cursos de agua (ríos, lagunas) si la situación se agrava; esto puede ser útil para apagar o alejar las llamas​. Si queda mucho humo, cúbrase la nariz y la boca con un paño húmedo​. Mantenga la cabeza baja para evitar inhalar el aire más denso. No ingrese a la zona afectada sin autorización oficial. Si alguna persona resultara herida o con signos de asfixia, solicite atención médica inmediatamente.

Medidas de prevención de incendios forestales

La prevención es la mejor herramienta contra los incendios forestales. Implica tanto acciones individuales como colectivas para reducir el riesgo. Entre las medidas más importantes están:

• Evitar fuegos ilícitos: No encienda fogatas ni queme basura en días de alto riesgo. Si necesita hacer fuego (por ejemplo, en camping o para quemas agrícolas controladas), hágalo sólo en sitios habilitados y con precauciones. Limpie un perímetro despejado de al menos 5 metros alrededor del fuego​, rodee el área con piedras, use leña seca y mantenga agua o tierra cerca para apagar rápidamente chispas​. Apague completamente cualquier fogata antes de retirarse​.
• Quemas agrícolas reguladas: En zonas rurales es obligatorio inscribirse como “usuario del fuego” y avisar a CONAF con anticipación (al menos 24 horas) antes de realizar una quema agrícola o controlada​. Además, construya cortafuegos (líneas o franjas limpias de vegetación) que ayuden a detener el avance del fuego​. No realice quemas en días de viento fuerte o temperaturas extremas​.
• Mantenimiento del entorno: Mantenga despejados los alrededores de su vivienda o instalaciones rurales eliminando maleza, ramas secas y desechos combustibles​. Esto reduce el material incendiario cerca de las construcciones. Guarde leña, carbón, cilindros de gas y otros combustibles bien alejados de fuentes de calor​.
• Prohibición de colillas: No fume ni arroje colillas encendidas cerca de vegetación seca. Tampoco debe tirar fósforos o encendedores en el suelo. Una simple colilla puede iniciar un incendio catastrófico si cae sobre pasto o follaje seco​.
• Educación y campañas: Siga las recomendaciones de CONAF, SENAPRED y Bomberos en sus campañas de difusión. Conozca los períodos de temporada alta de incendios (generalmente octubre a marzo en el centro-sur) y obedezca las ordenanzas locales (por ejemplo, restricción de quemas en ciertas fechas). Denuncie a las autoridades cualquier práctica riesgosa (quemar basura, uso indebido del fuego, sospecha de incendio intencional) ya que la prevención colectiva salva vidas.

Estas acciones preventivas ayudan a evitar tragedias. Como señala la SAG, siempre que trate con fuego “preocúpese de hacerlo de manera precavida” y mantenga a la comunidad informada​. Recuerde que en Chile existe un calendario oficial de quema controlada, y realizar una quema sin permiso puede derivar en sanciones y, sobre todo, en peligros graves.

Principales instituciones involucradas en la emergencia

En Chile la respuesta frente a incendios forestales involucra a varios organismos con roles específicos:

CONAF (Corporación Nacional Forestal)

La CONAF es la agencia estatal encargada de la política forestal de Chile y la protección de los ecosistemas boscosos​. Depende del Ministerio de Agricultura y su misión incluye garantizar la conservación y manejo sustentable de los bosques, así como combatir incendios forestales. CONAF dispone de brigadas forestales capacitadas para prevenir y atacar incendios en etapas iniciales. Además, administra el Calendario de Quemas (permisos de quemas agrícolas) y herramientas de prevención comunitaria. La CONAF mantiene un centro de operaciones de incendios y emite alertas sobre condiciones de riesgo. Para emergencias forestales su teléfono nacional es el 130.

Bomberos de Chile

Los Cuerpos de Bomberos de Chile son organizaciones voluntarias sin fines de lucro que atienden todo tipo de emergencias de incendio, incluidos los forestales cuando afectan zonas pobladas o interfases urbano-forestales. Cada comuna suele tener su Cuerpo de Bomberos que opera bajo principios democráticos y con autoridades electas​. En caso de incendio, los bomberos coordinan el apoyo terrestre y aéreo que CONAF solicite, al mismo tiempo que ayudan en evacuaciones y rescates. El número de emergencia para llamar a los bomberos en cualquier siniestro de fuego (estructural o forestal) es 132​.

SENAPRED (antes ONEMI)

El SENAPRED es el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres, creado por la Ley 21.364. Funciona en el Ministerio del Interior y fue el sucesor de la antigua ONEMI. Su mandato es planificar y coordinar la preparación y respuesta ante emergencias de todo tipo (naturales y antrópicas) en Chile​. En el contexto de incendios forestales, el SENAPRED no combate directamente las llamas, pero emite alertas tempranas (por ejemplo, la herramienta “Botón Rojo”), coordina evacuaciones si es necesario, y moviliza recursos interinstitucionales (Gobierno, Fuerzas Armadas, Carabineros, PDI, ONEMI regional, etc.). SENAPRED también promueve la educación y simulacros en las comunidades.

Carabineros de Chile y PDI

Carabineros (policía uniformada) y la Policía de Investigaciones (PDI, policía civil) apoyan en distintos frentes. Carabineros colabora en el control del orden público durante emergencias, regula el tránsito en zonas de evacuación y participa en rescates. La PDI, junto con el Ministerio Público, investiga el origen y las circunstancias de los incendios forestales, considerándolos a menudo delitos si existe negligencia grave o malicia. De hecho, CONAF realiza investigaciones de causa en convenio con PDI y Carabineros para esclarecer quién inició el fuego​. Los números de emergencia para estas policías son 133 (Carabineros) y 134 (PDI)​.

Números de emergencia específicos para incendios forestales en Chile

En caso de incendio forestal se deben usar los teléfonos especializados adecuados. En Chile destacan:

• 130 – CONAF: Situación de incendio forestal (alerta roja). Unidad de combate de fuegos forestales.
• 132 – Bomberos: Cualquier fuego, incendio estructural o forestal en área poblada.
• 133 – Carabineros: Emergencias policiales y ayuda en evacuación/orden público.
• 134 – PDI: Investigación criminal de incendios intencionales o negligentes.
• 131 – SAMU: Emergencias médicas (ambulancias). Útil en caso de víctimas con lesiones o problemas respiratorios graves.

También existe el número 911 a nivel nacional, que orienta la llamada al servicio correspondiente, pero en la práctica los números directos antes mencionados son los recomendados para incendios. En resumen, los fonos más relevantes son 130 (CONAF), 132 (Bomberos), 133 (Carabineros) y 134 (PDI). Siempre que sea posible, indique el número de referencia regional o móvil si la emergencia no es en Santiago.

Recursos oficiales y enlaces útiles

• CONAF (Corporación Nacional Forestal) – Sitio oficial con información sobre prevención de incendios, mapas de riesgo, calendario de quemas y noticias sobre siniestros forestales.
• SENAPRED (Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres) – Página de la antigua ONEMI, con alertas de desastres, consejos de preparación y reportes de emergencias.
• Bomberos de Chile – Portal de la institución bomberil, con información de brigadas, campañas de prevención y cómo ayudar.
• ChileAtiende – Portal ciudadano del gobierno, con trámites útiles (por ejemplo, aviso de quema controlada) y fichas informativas sobre emergencias.
• Ministerio de Salud / Salud Responde – Orientación sanitaria en emergencias; tiene guías de protección respiratoria ante humo de incendios.
• ChilePrepara – Plataforma pública de preparación para desastres; contiene planes de evacuación y simulacros.
• Cruz Roja Chilena – Organización de ayuda humanitaria con recomendaciones de emergencia y prevención de riesgos.

Ejemplos prácticos

Para ilustrar cómo aplicar estas recomendaciones, veamos dos escenarios hipotéticos:

• Campamento en sector rural: Imagine que durante un fin de semana acampa en la precordillera con su familia. Antes de iniciar la fogata para cocinar, limpia el suelo y mantiene agua cerca. Al poco rato, advierte mucho humo proveniente de un lateral del bosque. Inmediatamente apaga la fogata por seguridad y llama al 130 (CONAF) informando la ubicación. Mientras llegan los brigadistas, empaca su campamento: cierra ventanas del vehículo, llena los termos de agua, cubre su boca con un paño húmedo y se prepara para evacuar siguiendo la ruta de salida más cercana. Así cumple los pasos de reportar, cortar combustibles (apagar fuego) y protegerse durante el escape.
• Casa en zona urbana periférica: Un vecino llama alarmado a su casa diciéndole que ve fuego en las laderas de un cerro cercano. Usted avisa al 132 (Bomberos) con exactitud geográfica. Mientras toda la familia coordina el plan de evacuación (toma documentos, ahorra agua para la familia y deja preparado el auto), cierran puertas y ventanas de la vivienda para impedir el ingreso del humo. El municipio activa el plan comunal, pero igual decide evacuar en calma antes de que el fuego avance. Se dirige a la ruta de evacuación, permaneciendo alejado del frente de llamas. En este ejemplo se siguieron las recomendaciones de notificar a emergencias, desconectar suministros, proteger la vivienda temporalmente y evacuar ordenadamente.

En ambos casos, la acción rápida, la comunicación con los servicios de emergencia y la preparación previa (kit de emergencia, conocimientos de rutas) hicieron la diferencia. Ante cualquier duda, recuerde que siempre puede consultar a las autoridades locales (bomberos, policías o autoridades comunales) para coordinar su salida o recibir orientación.

Consejos para actuar en zonas urbanas y rurales

En áreas urbanas

En ciudades o barrios cercanos a bosque, los principales peligros de un incendio forestal son el humo y la posible evacuación. Si nota humo en su vecindario, permanezca atento a la calidad del aire. Cierre puertas y ventanas para evitar que el humo ingrese al hogar; de ser posible, coloque paños húmedos en las rendijas​. Evite realizar actividades al aire libre extenuantes durante una emergencia de incendios. Mantenga a mano mascarillas (clínicas o comunitarias) para reducir la inhalación de partículas nocivas. Siga siempre las instrucciones de Carabineros o la autoridad local (por ejemplo, cortar avenidas o desviarlas) y no abandone su vivienda a menos que sea necesario. Si las autoridades indican punto de reunión o refugio en lugar seguro, cúmplalo de inmediato.

En áreas rurales

En sectores rurales o periféricos, los incendios pueden propagarse más rápido por la abundancia de combustibles. Por ello, tenga especialmente en cuenta los preparativos: despeje el perímetro de pastos secos, limpie techos de hojas y coloque cortinas o toldos ignífugos si dispone de ellos. Asegure ganado y mascotas: la SAG aconseja mantener a los animales domésticos controlados para llevarlos consigo al evacuar​. No intente perseguir el fuego en su vehículo ni aproximarse al frente. Organice con sus vecinos rutas de escape comunes y puntos de encuentro. Si vive lejos de redes de agua, identifique fuentes (represas, acequias, charcas) donde los brigadistas puedan abastecerse. En estos entornos, colabore con los equipos de emergencia facilitando el acceso a su propiedad (deje despejada una entrada amplia). La SAG también advierte no ingresar en ningún caso a zonas incendiadas sin autorización oficial​.